Esa chica me vuelve loca - Kelly Quindlen
Hablemos de lesbianas felices y románticas
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| Traducido por María Gay Moreno |
Esta editorial es la que se ha encargado de traer "She drives me crazy" al español (al igual que otras joyitas). Es una historia que yo veo recomendada para edades a partir de los 15/16 años (aunque en la página de la editorial veréis que está puesto a partir de los 12).
Si hay algo que caracteriza esta editorial, y a mis propias lecturas, es la búsqueda de la representación del colectivo LGTB+. En este caso, es un libro con representación lésbica juvenil. De esas historias bonitas entre chicas que son un abracito al corazón.
¿De qué va exactamente este libro?
Os cuento un poco. Tenemos a Scottie, una jugadora de baloncesto que acaba de perder su perder ante su exnovia. Imaginaos, esto no solo es una humillación, es una patada a su corazón. Fue su primera relación, su primer amor desesperado, y no quiere desprenderse de ella. Y ahora ha perdido ante ella. Todo mal.O incluso peor porque, con todo este drama encima, choca su coche contra Irene, la capitana de animadoras. Scottie no soporta a Irene, pero como le ha destrozado el coche ahora tiene que llevarla cada día en su coche. Durante este tiempo Scottie va a tener la "brillante" idea de que fingir salir con Irene es la mejor estrategia para recuperar a la ex que le ha roto el corazón.
Y, ¿merece la pena?
Sí. Este libro es un sólido 4'5/5, muy decente y con orgullo.
A ver, es un libro que he disfrutado como no hacía en mucho tiempo. Es un libro ligero y rápido de leer, con escenas potentes y momentos romanticones. Yo soy una persona que lee lentito y aun así tardé solo dos días en comérmelo entero. No es el tipo de libros que te hacen comerte la cabeza y te rondan cada día. Tampoco es su propósito serlo, lo que quiere es dejarte una sensación feliz en la boca.
¿Qué temas os vais a encontrar con este libro?
Aunque es un libro romántico de pies a cabeza tiene temas que engloba todo lo que son las relaciones humanas. El más importante y que recorre a Scottie desde el principio es el amor propio. Las personas muchas veces no sabemos como manejar las relaciones en las que nos involucramos, inconscientemente nos perdemos un poco en ellas.
Scottie está en una edad muy sensible para el desarrollo de su personalidad y debe aprender que una ruptura no es el fin de ella misma. Esa persona no se ha llevado nada de ti, sigues siendo una persona con gustos e individualidad propia. Me ha gustado mucho que en la trama del libro se haga énfasis en el tiempo para uno mismo. Buscar un hobby o actividad que es solo tuya donde te puedes refugiar y seguir siendo tú.
Las separaciones duelen y en el libro muestran muy bien como es el dolor que se debe superar. Llegar al punto donde, aunque se recuerde con cariño esos momentos felices, ya no duela ver a esa persona.
Todo esto desemboca en un río feroz cuando la relación en la que estás envuelto es tóxica. Cuando, no solo una de las personas en la relación se está perdiendo, sino que la otra está manipulando en base a esa necesidad de reconocimiento. Este libro trata este tema desde una simplicidad inteligente, muestra la realidad sin desprestigiarla pero da herramientas sencillas a las que aferrarte en situaciones similares.
Para terminar con un buen saber de boca en cuanto a los temas que trata. Mi favorito es la ambición deportiva de Irene. No quiero spoilearos mucho sobre el libro pero si hay algo que caracteriza a este personaje es su defensa de las animadoras como deportistas.
Algo que reconozco que no creí que fuese necesario, pero lo es. Y es que ella transmite una fuerza respecto a lo que le gusta y disfruta. Su defensa es tan férrea que dan ganas de animar a todas las animadoras del mundo y luchar por su respeto como deportistas. La autora hace un trabajo muy bueno en este aspecto y creo que se nota que sabe de lo que habla porque la frustración de Irene traspasa las páginas cuándo se las menosprecia.
Ya es difícil que tomen en serio a las deportistas en el mundo en el que vivimos; pero que, además, se menosprecien entre ellas según el deporte es desalentador. Por suerte libros como este ponen un foco en cuestiones en las que no pensamos mucho en nuestro día a día pero que realmente importan a muchas chicas en el mundo.
Ahora conozcamos un poco a los personajes
No quiero contaros mucho del libro así que simplemente os mencionaré a los personajes más interesantes y la función principal que tienen. Una sola frase para ver si con ello os enamora.
El libro está narrado y protagonizado por Scottie. Esta jugadora de baloncesto está un poquito rota pero solo necesita un tiempo y paciencia para recomponerse. No os voy a mentir, es posible que tengas momentos en los que te saca de quicio, pero su sentido del humor, en ocasiones, lo compensa.
Si tengo que hablar de Irene solo diré: es el amor de mi vida. Una animadora fuerte sin pelos en la lengua pero con una sensibilidad profunda que no deja ver al resto. La quiero mucho y me pasé el libro queriendo darle un abrazo.
Danielle también es un personaje increíble. La voz de la razón de Scottie, su mejor amiga y una perfeccionista compulsiva. Diría que me identifico con ella pero la verdad es que ya me gustará ser la mitad de lo que es. Es la capitana y entrenadora del equipo de baloncesto así que en muchas ocasiones la veía como la jefa de la protagonista.
Y por último, no es todo bueno en la vida. Las antagonistas de esta historia son Tally y Charlotte. Una sigue tratando de manipular a su ex aun estando separadas y la otra...bueno, ya lo veréis.
Merece la pena conocer a este grupo de chicas.
Mmm...no sé, necesito algo más para engancharme
Lo entiendo. Y voy a tirar de la vieja confiable. Soy comparatista (sí, estudié Literaturas Comparadas, oficialmente soy comparatista) así que os diré historias similares que os hayan podido gustar.
A mi, personalmente, me recuerda mucho a Tim Te Maro y la magia de los corazones rotos. También sucede en un instituto (aunque de magia) y es un enemies to lover muy similar al de Irene y Scottie. Ellas también deben convivir juntas y acercarse por ello.
Si leísteis y os gusto Hablemos de amor tengo que decir que Irene me recordó mucho a la protagonista, Alice. He de decir que me enamoré de ambas y, aunque tienen sus diferencias, ambas tienen una fuerza común.
Por último, si sois más de novelas gráficas y habéis leído Cheerleaders: Orgullo y pompones. Esta obra también se reivindica la importancia de las animadoras en los institutos como algo más allá que las figuras que nos presentan en las películas. Es una historia con mucha representación que seguro dejaría orgullosa a Irene.
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